Qué egoísta eres, nunca me escuchas cuando te hablo
- SAM
- 19 dic 2024
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 20 dic 2024
Todos necesitamos ser escuchados, de eso no hay duda.
Es parte de nuestra naturaleza humana.
Pero también sabemos cuando alguien nos escucha y cuando pasan de nosotros.
Podemos leer las señales fácilmente si observamos un poco.
Si queremos, claro.
Te cuento....
Para no poner nombres, vamos a imaginar la típica pareja feliz y contenta de la vida un martes.
Digo el martes, porque si es el miércoles, igual y solo "igual", ya se están montando el pollo.
Así que felices y contentos el martes.
Bien.
Ella es de las que hablan hasta por los codos.
Él también, pero más con los amigos en el bar.
Vale, bien también.
La parejita ese día salió a cenar, era el aniversario de su boda.
¿Un martes?
Sí, un martes.
Se casarón el sábado pero este año su aniversario cayó el martes.
-Chica le sacas punta a todo, escucha, escucha primero.
Continúo...
Martes, cena romántica, botellita de vino, niños con los abuelos y casa para ellos solos.
Imagínate....
Martes de película.
Total, entráron por la puerta de casa ya calientes, besándose intensamente, patada a la puerta para entrar y luego para cerrar. Continuáron besandose hasta llegar al salón.
Rozando el escándalo público en mitad del salón.
Calientes como un chocolate a la taza en invierno, esperando a untar el churro.
Él se quitó el pantalón.
Ella hizo lo mismo con el suyo.
Él se fijó en su nuevo tanga de encaje blanco, erótico, precioso. Aquel minúsculo trozo de tela consiguió ponerle más caliente todavía.
Antes de abalanzarse sobre ella, le susurró al oído....
-Me encanta tu nuevo tanga.
Se jodió.
Ya no follaron.
(...)
Y sí, efectivamente, el miércoles comieron pollo.
Pd: A buen entendedor....
Pd2: Céntrate en lo importante.
Pd3: Aprovecha el momento, vive el presente.
SAM
¡Construir la vida que deseas
está en tus manos!