Piensa en blanco, piensa en blanco, piensa en blanco!!!

Meditar y pensar en blanco.

Yo no tengo ningún tipo de rutina de meditación ni nada por el estilo, lo siento.

Ya te dije que no era perfecto.

Lo que sí hago es pensar.

Y como pienso me hago preguntas....

¿Pensar y meditar es lo mismo?

Vamos a verlo.

He escuchado muchas veces que para meditar no hay que pensar nada, aaaah.

Que la meditación va de no pensar.

Pues entonces hay muchos que meditan y no lo saben.

Jajajaja.

No en serio.

Hay un mito muy extendido que refiere que para meditar no hay que pensar y poner la mente en blanco.

Piensa en blanco, piensa en blanco, pi-en-sa-en-blan-co.

¿Cómo se puede pensar en blanco?

Los últimos que pensaron en blanco fueron los Cazafantasmas y uno la cagó.

La cagó por no pensar en blanco y nació el hombre de Malvavisco.

No sé si te acuerdas.

Peliculón.

.......

Bueno, a lo que voy.

Que me enredo con mi pensamiento.

Meditar, pensar, pensar, meditar.

No tienen nada en común o es un todo común y viene a ser lo mismo.

Lo importante en la meditación es controlar el pensamiento y dirigirlo.

Nada de pensar en blanco.

Te digo yo que eso no se puede, solo en las pelis.

Todos consiguieron pensar en blanco menos uno, por algo será.

(...)

Con esta reflexión me doy cuenta de que sí, si que tengo el hábito de meditar y encima lo hago todos los días.

Me gusta saber lo que pienso, escucharme.

Así puedo dirigir mis pensamientos hacia lo que me interese en cada momento.

Y te diré más....

Cuando me doy cuenta que me he quedado enganchado en un pensamiento que se repite y se repite y se repite es momento de ponerme a meditar.

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Te doy las claves, por si lo quieres probar tú:

Escuchar, el pensamiento.

Entender, porqué se produce.

Dirigirlo, hacia algo positivo.

Bienvenida a la Meditación activa!!!

SAM

www.uncafeconsam.com 

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